viernes, 7 de diciembre de 2018

EMBOLIA GRASA

La embolia grasa es la obstrucción de un vaso arterial por un émbolo graso. Se produce en muchas ocasiones debido a la fractura de la diáfisis de los huesos largos, normalmente fémur. Estos huesos contienen trioleínas, unas grasas muy líquidas que penetran con facilidad en el torrente sanguíneo. También pueden producirse como consecuencia de intervenciones quirúrgicas en las que se introducen clavos que aumentan la presión, en resecciones de tumores óseos, inyecciones de sustancias oleosas en sangre, amputaciones etc. Tras un primer momento sin síntomas, aparece taquicardia, taquipnea, disnea, hipoxia e hipocapnia, fiebre, alteraciones en la conducta (apatía, obnubilación, convulsiones etc.). Es una complicación derivada de una lesión traumatológica de difícil detección pero muy grave y potencialmente mortal.

El tratamiento de esta patología se basa en el mantenimiento de de la perfusión tisular, con albúmina, debido a que se fijan a los elementos grasos periféricos y evitan que lleguen émbolos grasos a nivel pulmonar y cerebral, y medidas de soporte ventilatorio-invasivas si la situación clínica lo requiere. Es fundamental la estabilización precoz de fracturas, evitando la llegada de moléculas grasas al torrente circulatorio, y valorar el estado hemodinámico del paciente y buen control de perfusión/diuresis que permite el “lavado” de elementos grasos a nivel sanguíneo.

En el siguiente enlace se puede ver un caso clínico de embolia grasa a modo de ejemplo: https://anestesiar.org/2016/si%C2%ADndrome-embolia-grasa-tras-fractura-diafisaria-femur/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario